TOXINA BOTULÍNICA: LO QUE TENÉS QUE SABER ANTES DE DECIDIRTE
A más de diez años de su utilización, la toxina botulínica continúa siendo el tratamiento de elección para prosperar las arrugas de expresión, que son aquellas que se generan cuando el músculo se contrae y la piel que lo acompaña.
El procedimiento, que está disponible para usted en Clinica Lemel, consiste en microinyecciones que se aplican normalmente en el tercio superior de la cara, para las arrugas perioculares o bien patas de gallo, las líneas en la frente, ceño y para progresar la expresión de los ojos.
Asimismo se emplea en el cuello para disimular las bandas platismales.
En estos casos, la toxina genera una micro relajación, lo que hace que la piel asimismo se relaje.
Es esencial resaltar que lo idóneo es reducir la fuerza de contractilidad del músculo y no paralizarlo, puesto que esto es lo que hace que los ademanes no se vean naturales.
Para esto, es esencial asistir a un especialista especialista en la aplicación del mismo, que cuente con gran conocimiento de la musculatura facial.
¿De qué forma se aplica?
La aplicación de Botox es un proceso ligerísimamente invasivo, veloz y también indoloro que no requiere test de alergia, lleva pocos minutos y los pacientes pueden seguir con su ritmo de vida frecuente sin inconvenientes.
Se aplica a través de micro-inyecciones de manera directa en el músculo responsable de la capacitación de la arruga y, al relajarlo provisionalmente, previene la capacitación de nuevas líneas de expresión, en tanto que su efecto impide la profundización de las arrugas existentes y la capacitación de nuevas actuando de forma precautoria.
Los efectos iniciales son perceptibles a las setenta y dos horas tras el tratamiento, y los máximos resultados a los quince días, cuando se cita de nuevo al paciente para una evaluación y retoque si es preciso.
¿Cada cuánto tiempo se debe regresar a aplicar?
La pérdida del efecto es gradual y la duración de sus resultados es de cuatro a seis meses, en dependencia del metabolismo de cada paciente, la técnica de aplicación y dosis usada.
Cuando concluye el efecto, el paciente vuelve al estado precedente a la aplicación, habiendo eludido a lo largo de ese periodo que el correr del tiempo prosiga dañando la piel: esa es la función precautoria que tiene la toxina botulínica.
¿Cuáles son los efectos inmediatos a la aplicación y cuánto tiempo tardan en desaparecer?
Los efectos desfavorables aparecen en menos del 1 por ciento de los casos y, si suceden, son leves, localizados y temporales.
Pueden ser enrojecimiento y/o dolor en la zona donde se inyectó el producto; algún pequeño hematoma o bien cefalea ocasionado por la tensión en el instante de la aplicación.
Aunque es baja la posibilidad de aparición de factores desfavorables, todos estos son menores y desaparecen en las primeras horas.
Claramente, el tratamiento con toxina botulínica es seguro y llegó para quedarse como uno de los tratamientos más efectivos para tratar las arrugas del semblante.
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